miércoles, 22 de julio de 2015

Compromiso real o moda pasajera en el Budismo.


Muchas personas comentan que sentarse a hacer Meditación aunque estés bien instruido en las posiciones harás Zen y llegar a la iluminación o Satori. 
La meditación unifocal o llamado Zazen es una gran herramienta, pero es sólo una parte del proceso. Esto lo veo en infinidad de veces en diferentes templos de miembros que son muy devotos, pero no logran cultivarse en la enseñanza suprema del Buddha. Las 4 Nobles Verdades y el Óctuple Sendero
.
Los elementos del noble camino óctuple se subdividen en tres categorías básicas:
1 sabiduría, conducta ética y entrenamiento de la mente; para rehabilitar y desacondicionar la mente. En todos los elementos del noble camino, la palabra «correcta» o «recta» es una traducción de la palabra "sammā" (en pali), que significa ‘plenitud’, ‘coherencia’, ‘perfección’ o ‘ideal’. El noble camino es:
SABIDURÍA (pali: paññā)
1 (sánscrito: dṛṣṭi • pali: diṭṭhi) visión o comprensión correcta
2 (saṃkalpa • saṅkappa) pensamiento o determinación correcta
CONDUCTA ÉTICA (Sila)
3 (vāc • vācā) Hablar correcto
4 (karmānta • kammanta) Actuar correcto
5 (ājīva • ājīva) Medio de vida correcto
ENTRENAMIENTO DE LA MENTE (samadhi)
6 (viāiāma • vāiāma) Esfuerzo correcto
7 (smriti • sati) Estar-Presente o Consciencia del momento correcta
8 (samādhi • samādhi) Concentración o Meditación correcta.
Entonces si no estamos consientes de que este es el proceso y no hacemos nada por mejorar nuestro patrones de conducta diaria y la manera de procesar nuestros pensamientos de la mente, de nada servirá sentarnos y recitar sutras en otro idioma, por eso muchos se frustran cuando el sentimiento de bienvenida y camaradería pasa a la tercera sesión. También existen muchos casos que inician el proceso de preparación por medio de algún maestro calificado de transmitir las herramientas, pero al primer o segundo libro truenan por la falta de compromiso real generalmente relacionado con el Ego. 
Cortar con viejos vicios conductuales se ocupa perseverancia y constancia.
El crecer significa salir de nuestra zona de confort. No pidamos cosas extraordinarias a la vida, si no hacemos nada extraordinario, la ley causa y efecto es infalible en el Buddha Dharma.

martes, 21 de julio de 2015

ALGUNAS DE LAS CAUSAS MÁS COMUNES DE LA IRA




Es posible ver la ira funcionando todo el tiempo. Por todas partes se ven ejemplos de gente experimentando diversos grados de inmovilidad, desde una pequeña molestia hasta la furia ciega. Es el cáncer, aunque aprendido, que se introduce en medio de las interacciones humanas. A continuación, he aquí algunos de los casos más comunes de ira, es decir de ocasiones en que la gente escoge la ira.
La ira en el coche. Los conductores le gritan a los demás motoristas por casi todo. El comportamiento de acelerador de pulso ocurre cuando otra persona va demasiado rápido, demasiado lento, no hace señales, señala equivocadamente, cambia de carriles o comete cualquier equivocación. Como conductor puedes llegar a experimentar gran cantidad de rabia e inmovilidad emocional por las cosas que te dices a ti mismo de la manera como los demás deberían conducir. Igualmente las congestiones de tráfico son como señales claves para los ataques de furia y hostilidad. Los conductores les chillan a los pasajeros y se expresan con palabrotas respecto a las causas del atasco. Todo este comportamiento es consecuencia de un solo pensamiento:
"Esto no debería estar sucediendo; y porque sucede, yo me voy a molestar e incitaré a los demás a escoger también la infelicidad".
- La ira en los juegos competitivos. El bridge, el tenis, la canasta, el póquer y una variedad de otros juegos son grandes provocadores de ira.
La gente se enfada con sus compañeros o con sus contrincantes por no hacer las cosas bien o por infracciones a las reglas del juego. Pueden llegar a tirar al suelo una raqueta de tenis porque cometieron un error. Y aunque gritar y patalear y tirar el equipo por los aires es más sano que gritarle o pegarle a los demás, es igualmente una barrera de contención para la plenitud de goce y realización de tu momento presente.
- Ira ante lo fuera de lugar. Mucha gente siente rabia contra un individuo o un suceso que considera fuera de lugar. Por ejemplo, un conductor de coche en una carretera o calle puede decidir que un ciclista o peatón no debería estar allí y tratar de echarlo fuera. Este tipo de ira puede ser sumamente peligrosa. Muchos de los denominados accidentes resultan en realidad de este tipo de incidentes en los que la furia incontrolada ha tenido efectos desastrosos.
- Ira ante los impuestos. Por más cantidad de ira que se malgaste en rabiar contra los impuestos, nadie podrá cambiar las leyes de nuestro país pero la gente sigue rabiando igual porque los impuestos no son como ellos quisieran que fueran.
- Ira debida a la lentitud de los demás. Si esperas que los demás funcionen según tu horario, optarás por enfadarte cuando no lo hagan y justificarás tu inmovilización con "Tengo derecho a enfadarme. Hace media hora que me tiene esperando".
- Ira por el desorden o desorganización de los demás. A pesar del hecho de que tu rabia alentará a los demás a comportarse de la misma manera, posiblemente persistirá tu actitud de escoger la ira.
Ira contra los objetos inanimados. Reaccionar con un grito de rabia porque te golpeas la espinilla o porque te das en el dedo con un martillo puede ser terapéutico, pero sentir realmente furia y atravesar la puerta de un puñetazo no es sólo inútil sino que también puede ser muy doloroso.
- Ira debida a algún objeto perdido. Por más que rabies, la rabia no logrará recuperar tu llave o tu monedero, y probablemente evitará que organices una búsqueda eficiente.
- Ira ante sucesos mundiales que están fuera de tu control. Quizá no estés de acuerdo con la política del gobierno, con las relaciones exteriores, o la economía pero tu ira y la consiguiente inmovilización no cambiarán nada.

lunes, 6 de julio de 2015

Muy Feliz cumpleaños y eternas Bendiciones!!




S. S. XIV Dalai Lama nace en Takster (Tíbet), en 1935, en el seno de una familia campesina.
Cuando tenía dos años, Tenzig Gyatso es reconocido como la reencarnación del décimo tercer Dalai Lama, líder espiritual y político de Tíbet. Comienza sus estudios a la edad de seis años y, a los veinticinco, obtiene el título de gueshe lharampa (doctor en filosofía budista).
Tras la invasión china de Tíbet en 1959, dirige el gobierno tibetano en el exilio desde Dharamsala (India) y defiende el legítimo derecho a la autodeterminación de su país con un mensaje pacífico de no-violencia. En reconocimiento a su incansable labor, en 1989 se le concede el premio Nobel de la Paz.

jueves, 2 de julio de 2015

Siempre que te parezca que algo está mal, primero encuentra la causa en ti mismo.



Pregunta: "El tantra dice que no luches o nades, sino que te dejes llevar y flotes en el río de la vida. Pero la experiencia muestra que la moderna vida urbana de velocidad y tecnología pesada crea tensiones constantes y agotamiento físicos y mentales. ¿Cuál será la actitud del tantra con respecto a esto? ¿No es bueno evitar los agotamientos innecesarios?"

Osho: "La vida siempre ha sido así, moderna o primitiva. Hay tensiones, hay ansiedades. Los objetos cambian , pero el hombre sigue siendo el mismo. Hace dos mil años conducías un coche de bueyes, ahora conduces un coche, pero el conductor sigue siendo el mismo... Estaba ansioso por su carro, tenso por su carro; ahora está ansioso y tenso por su coche. Los objetos cambian, pero la mente sigue igual.

Así que no pienses que tienes tanta ansiedad debido a la vida moderna. Es debido a ti, no a la vida moderna, y estarás ansioso en cualquier parte, en cualquier tipo de civilización. Vete a un pueblo a pasar unos días -dos o tres días- y te sentirás bien por algún tiempo, porque incluso las enfermedades necesitan un reajuste. Pero en tres días te habrás adaptado al pueblo, y entonces empezarán a llegar las ansiedades, sentirás otra vez perturbaciones. Las causas ya no serán las mismas, pero tú eres el mismo.

A veces sucede que puede que estés alterado debido al tráfico y al ruido de la ciudad, y puede que digas que no puedes dormir por la noche porque hay tanto tráfico y ruido. Entonces vete a un pueblo, y no podrás dormir porque no hay tráfico ni ruido. Tendrás que volver porque el pueblo te parece muerto, soso: porque no hay vida...

Tú eres el problema.... No es Bombay lo que te perturba, o Londres o Nueva York; ¡eres tú!. Y no es que Londres te haya creado; tú has creado Londres. No es el tráfico y el ruido y la prisa loca: tú has creado eso; tú y otros como tú. ¡Mira! La causa está dentro de ti. No es que estés tenso debido al ruido. Hay ruido porque estás tenso, y no puedes vivir sin él. Por eso existe. Lo necesitas, no puedes vivir sin él...

Esta vida urbana la ha creado tu mente loca. No te estás volviendo loco debido a estas ciudades; estas ciudades se han construido debido a tu mente loca. Han sido construidas para ti y por ti, y existen para ti. Y a no ser que esta mente loca cambie, estas ciudades no pueden desaparecer; tendrán que permanecer. Son tu subproducto.

Recuerda una cosa: siempre que te parezca que algo está mal, primero encuentra la causa en ti mismo. No vayas a ninguna parte. Noventa y nueve veces de cada cien, encontrarás la causa dentro de ti mismo. Y si encuentras la causa dentro de ti noventa y nueve veces de cada cien, la centésima causa desaparecerá por sí sola.

Tú eres la causa de todo lo que te está sucediendo. Tú eres la causa, y el mundo es sólo un espejo. Pero es consolador encontrar siempre la causa en otra parte. Entonces nunca te sientes culpable, nunca te sientes autocondenado. Siempre puedes decir que la causa está ahí, y a menos que esta causa cambie, "¿cómo voy a cambiar yo?". Puedes ampararte en eso; esto es un truco. De modo que tu mente siempre va proyectando causas en alguna otra parte. La esposa está alterada debido al marido; la madre está alterada debido a los hijos, y los hijos están alterados debido al padre. Todo el mundo está alterado debido a algún otro, y todo el mundo piensa que la causa existe fuera...

Todo ello es estúpido, y lo seguirá siendo a menos que cambies de actitud. Y trata siempre de encontrar primero la causa dentro de ti...

La dicha es tu creación y la desdicha también es tu creación. Puedes transformar tu desdicha en dicha porque es tu creación...".

Osho, El libro de los secretos.

miércoles, 1 de julio de 2015

¿Es posible agradecer lo que nos causa daño?

























Cuando el dolor invade nuestra mente,
Descubrimos el Dharma.
Y encontramos la felicidad perdurable.
¡Gracias sufrimientos!

Debido al daño que nos causan los espíritus,
Descubrimos el Dharma
Y conocemos la impavidez.
¡Gracias espíritus y demonios!

Por el odio de otros,
Descubrimos el Dharma
Y encontramos beneficio y felicidad.
¡Gracias seres que nos odian!

Por la cruel adversidad,
Descubrimos el Dharma
Y encontramos el camino inalterable.
¡Gracias adversidad!

Instigados por otros,
Descubrimos el Dharma
Y encontramos el significado esencial.
¡Gracias instigadores!

Les dedicamos nuestros méritos para poder recompensar su bondad.

Kunkhyen Longchenpa

La Raiz del Miedo

El miedo fundamental es el miedo a la muerte.




Pregunta:
"¿Puede hablar un poco más sobre ese fenómeno que denomina "sumergirse en la nada"? Parece como si se tratara de caer en un espacio vacío y me produce dudas y mucha inseguridad".

Osho: 
"La palabra vacío denota ausencia de ocupación. Si uno va hasta su raíz, descubre que en realidad es una palabra hermosa. La raíz es fecunda en sí misma: significa ocio, desocupación. Estás vacío siempre que estás ocioso, desocupado.
Recuerda el proverbio que dice que la mente vacía es el taller del demonio; es una tontería. Todo lo contrario: la mente ocupada es el taller del demonio. La mente vacía es el taller de Dios, no del demonio. Pero deben comprender lo que quiero decir cuando hablo de "vacío"; me refiero a ocio, serenidad, ausencia de tensión, ausencia de movimiento, ausencia de deseo, ausencia de destino. Es sencillamente estar aquí, completamente presentes. Una mente vacía es presencia pura...
Hay tres estados de la mente. El primero es de conciencia más contenido. Siempre hay un contenido en la mente, trátese de un pensamiento, un deseo, ira, codicia, ambición. Siempre hay algún contenido en la mente, la cual nunca está sin ocupación. Hay tráfico durante todo el día, todos los días; hay tráfico en la vigilia y también en el sueño...
El segundo estado de la mente es conciencia sin contenido. Eso es la meditación. Estás totalmente alerta y hay un vacío, un intervalo donde no hay pensamientos. No estás dormido, sino despierto, pero no hay pensamientos...
Y hay un tercer estado...
Este tercer estado se denomina samadhi, o ausencia de contenido, ausencia de conciencia.... y es a este estado al cual se refiere Buda cuando habla de shunyata o vacío.
Primero debes abandonar el contenido para estar medio vacío y después abandonar la conciencia para estar completamente vacío. Y este vacío pleno es lo más maravilloso que puede ocurrir; es la más grande de las bendiciones.
En esa nada, en ese vacío, en esa ausencia de ser, en ese shunyata, la seguridad y la estabilidad son totales.
Les sorprenderá saber que la seguridad y la estabilidad son totales cuando ya no se es. Todos los miedos desaparecen porque, ¿cuál es el miedo fundamental?. El miedo fundamental es el miedo a la muerte y todos los demás miedos son reflejos de éste. Todos los demás miedos se pueden reducir a uno solo: el miedo a morir, el miedo a desaparecer algún día: "Soy, pero llegará el día en que ya no seré". He ahí el miedo fundamental.
Para evitar ese miedo, nos comenzamos a mover de tal manera que podamos vivir el mayor tiempo posible. Ese miedo nos incita a tratar de asegurar la vida transando y buscando más y más seguridad. Entonces nos paralizamos, porque mientras más seguros y a salvo, menos vivos estamos.
La vida está presente en los desafíos y en la crisis. La vida necesita inseguridad, se nutre de la inseguridad. Siempre que hay inseguridad nos sentimos más vivos, más alertas. Esa es la razón por la cual tanto ricos son tan insulsos; los invade una especie de torpeza y sopor. Es tan grande su seguridad que no hay desafíos. Es tan grande su seguridad que no necesitan ser inteligentes. ¿Para qué necesitan inteligencia en medio de tanta seguridad? La inteligencia nace del peligro y se necesita para enfrentar desafíos.
Por tanto, el miedo a la muerte nos impulsa a buscar la seguridad, el dinero en el banco, los seguros, el matrimonio, la estabilidad, el hogar. Nos convertimos en ciudadanos de un país, nos vinculamos a un partido político, nos unimos a una iglesia, nos hacemos hinduístas, cristianos, musulmanes. Todas esas son formas de buscar la seguridad. Todas son formas de buscar un sitio al cual pertenecer...
Cuando conozcas ese vacío interior, perderás el miedo porque habrás vivido la muerte. Ella sucede en ese vacío. En ese vacío desaparecerás, de modo que ya no tendrás nada que temer. ¿A qué podrías temerle? ¿A quién? ¿Y quién podría tener miedo? En ese vacío desaparecen todos los miedos porque allí sucede la muerte. Toda posibilidad de morir desaparece. Sentirás una especie de eternidad, de ausencia de muerte. La eternidad habrá llegado y no tendrás que buscar seguridad. Ya no la necesitarás.
Ese es el estado del sannyasin, es el estado en el cual no necesitas ser parte de un país, o de una iglesia o de ninguna otra tontería de esas.
Es solamente cuando no tengas nada que podrás ser tú mismo. Parece paradójico...
No tendrás que transarte porque eso es algo que haces a causa del miedo y de la codicia. Y podrás vivir en permanente rebelión porque no tendrás nada que perder. Podrás encarnar la rebelión misma, porque no tendrás nada que perder. Nadie podrá matarte porque ya tú mismo lo habrás hecho. Nadie podrá quitarte nada porque ya lo habrás abandonado todo. Estarás en la nada, serás la nada. De allí ese fenómeno paradójico de que la nada da lugar a una gran seguridad, una gran tranquilidad y una gran estabilidad, puesto que desaparece la posibilidad de la muerte.
Y con la muerte desaparece el tiempo. Con la muerte desaparecen los problemas creados por la muerte y el tiempo. Y, a su paso, todas estas desapariciones dejan espacio para un cielo puro. Este cielo puro es samadhi, el nirvana".
Osho, El miedo. Cómo comprender y aceptar las incertidumbres de la vida.